La Feria Internacional de las Culturas Amigas (FICA) es el evento de carácter cultural más importante de la Ciudad de México que se lleva a cabo del 14 al 29 de abril de cada año en el centro de la capital. En ésta, su décima edición, se exhiben un total de 86 representaciones diplomáticas de los cinco continentes, y los organizadores del evento calculan recibir más de cuatro millones de visitantes.
Cada año FICA busca propuestas innovadoras, tanto para los contenidos, como para el diseño de la Feria. Este año el diseño ganador del concurso quedó a cargo del despacho de arquitectura TO, que resultó elegido entre 61 candidaturas y cinco finalistas. El proyecto, titulado UR, se inspiró en el desarrollo común de diferentes civilizaciones alrededor del mundo. Para los sumerios UR significaba ciudad, en latín dio origen al vocablo urbs (de ahí nuestra palabra urbe) y en las lenguas germanas es un prefijo que denomina el concepto de origen; una sílaba universal que representa algo esencial: hacer ciudad.
Con esta reflexión en mente, TO elaboró un proyecto que surge de emplazar una semilla y replicarla en una retícula para formar un arreglo que libera las esquinas de la plaza y forma un sistema de ágoras techadas por amplias cubiertas que aportan sombra y ventilación cruzada a sus visitantes. El resultado final es un conjunto arquitectónico que remite al origen de nuestra ciudad, que subyace bajo el recinto pétreo del zócalo, un centro urbano conformado de calzadas, plazas y basamentos.
El sistema estructural responde a una lógica de distribución de esfuerzos, que permite librar claros de 400m2 sin apoyos intermedios. Cada pieza del sistema es esencial y se articula con las demás de manera que el pabellón se puede armar y desarmar con facilidad. Como una manta huichola, un tejido maori o un mandala tibetano, el conjunto de las estructuras cobija el flujo de gente desde y hacia todas las direcciones, con espacios de tránsito y demora, otorga múltiples opciones de recorrido y permanencia. Su arquitectura se teje entre velas y tensores, forma un tensegrity, cuya definición mecánica es “islas de comprensión en un mar de elementos a tensión” que hace que la arquitectura flote.
Como un barco que llega para anclarse un momento y retirarse, el pabellón espera una vida futura, más allá del término de la Feria. Las cubiertas de los pabellones se convertirán en espacios polivalentes, como centros de acopio, albergues temporales o talleres en el marco de los sismos que han afectado recientemente a nuestro país. El título del Pabellón CDMX “Ciudad Creativa, Ciudad Resiliente” se llevará a sus últimas consecuencias gracias a la suma de esfuerzos de diferentes asociaciones, despachos y oficinas gubernamentales.
Proyecto
José Amozurrutia, Carlos Facio
Mariana Brito, Úrsula Rebollar, Álvaro Martínez
Colaboradores
Patricia García Morales, Ana Lu Villaseñor, Angélica Mota, Sergio Carbajal y Ana Elisa Vargas
Renders
Paul Ino
Obra y Proyecto Estructural
Arq. Eric Valdez, LABG
Análisis Estructural
HYPARCH Arquitectura Flexible
Donación a
Piensa Sostenible
Re_Construir México